ANTES DE COMENZAR:
Ora y pídele a Dios que te hable a través de Su Espíritu Santo. “EL ESPIRITU SANTO INTERPRETE, QUE EL PADRE LES ENVIARA EN MI NOMBRE, LES VA A ENSEÑAR TODAS LAS COSAS Y LES RECORDARA TODAS MIS PALABRAS.” (JUAN 14:26)
PRIMER DIA Vuelve a leer las lecturas de la semana pasada.
- ¿Cuál fue el mensaje qué recibiste de la homilía o de las lecturas que oíste en misa el domingo?
- ¿De lo que aprendiste, qué escogiste para aplicar a tu vida esta semana?
SEGUNDO DIA LEE JEREMIAS 20: 7-9 PRIMERA LECTURA
(“Pero sentí en mi algo así como un fuego ardiente en mi corazón.”)
- ¿Quién está hablando y a quién le está hablando? Jeremías 20:1,7
- ¿Cómo vino la palabra del señor a Jeremías y cómo respondió éste? Jeremías 1:4-7
- ¿Qué dijo que el Señor le había hecho, qué sucedió y por qué? Jeremías 20:7
- ¿Qué pasa todo el día? Jeremías 20:7
- ¿Siempre que el habla, cuál es su mensaje? Jeremías 20:8
- ¿Qué le ha traído la palabra del Señor? Jeremías 20:8
- ¿Qué se dice Jeremías a si mismo? Jeremías 20:9
- ¿Qué sucede con su corazón y sus huesos cuando no habla? Jeremías 20:9
- ¿De qué estaba Jeremías cansado y qué es lo que ya no podía aguantar? Jeremías 20:9
- ¿Qué dice Pablo acerca de predicar el Evangelio? 1 Corintios 9:16-17
Personal – ¿De qué modo has tenido ese deseo ardiente de enseñar o predicar la Palabra de Dios desde que empezaste a estudiar Su Palabra? Ya no te fatigues aguantándote de no hablar y comparte con los que están cerca de ti lo que El Señor te ha enseñado.
TERCER DIA ROMANOS 12:1-2 SEGUNDA LECTURA
(“…transfórmense por la renovación de su mente.”)
- ¿A quién le está hablando Pablo? Romanos 1:7 y Romanos 12:1
- ¿Qué les suplica que hagan con sus cuerpos a través de la misericordia de Dios, y como han de hacerlo? Romanos 12:1
- ¿Para qué fue la muerte de Cristo de una vez por todas; y a qué debemos nosotros considerarnos muertos? Romanos 6:10-11
- ¿Por quién estás vivo, y qué es lo que no debes permitir a tu cuerpo? Romanos 6:11-12
- ¿A quién le ofreces tu cuerpo y por qué razón? Romanos 6:13
- ¿A qué no debemos amoldarnos? Romanos 12:2
- ¿Por medio de qué debemos transformarnos y por qué razón? Romanos 12:2
- ¿De dónde viene la renovación? Tito 3:5
- ¿De qué vivimos que nos transforma la mente? Mateo 4:4
- ¿Cómo puedes juzgar la voluntad de Dios? Juan 12:44-48, concentrándose en el versículo 48
Personal – ¿De qué modo ha transformado Dios tu mente esta semana por medio de lo que has estudiado de las escrituras? ¿Cómo ha afectado eso a los que están a tu alrededor? ¿De qué modo has adorado a Dios en tu cuerpo? ¿Es tu cuerpo santo y aceptable para hacer adoración al Señor?
CUARTO DIA MATEO 16:21-27 EVANGELIO
(“El que quiera seguirme que renuncie a si mismo, …”)
- ¿A dónde dijo Jesús que tenía que ir, que iba a pasar ahí y a manos de quién? Mateo 16:21
- ¿Qué hizo Pedro y qué le dijo a Jesús? Mateo 16:22
- ¿Cómo respondió Jesús a Pedro, a quién le dijo que se quitará de su vista? ¿Cómo quién estaba Pedro juzgando, de acuerdo con Jesús? Mateo 16:23
- ¿Cómo son esos Judíos que no son otra cosa que miembros de la Asamblea de Satanás? Apoc. 2:9
- ¿A quién dice Jesús que el hombre debe renunciar, qué es lo que debe de tomar y qué debe empezar a hacer? Mateo 16:24
- ¿Qué le pasa al que se busca solo a si mismo, y cómo descubres quién eres tú? Mateo 10:39
- ¿Qué es no buscarse a si mismo? 1 Corintios 13:4-5
- ¿Qué conseguirá el que quiera asegurar su vida? ¿Y aquél que la pierda por El que conseguirá?
Mateo 16:25
- ¿Cuáles son las dos preguntas que Jesús hace a Sus discípulos en Mateo 16:26?
- ¿Cuándo el Hijo del Hombre venga con la gloria de Su Padre acompañado de Sus ángeles como recompensará a cada uno? Mateo 16:27
- ¿Cómo seguimos los pasos de Jesús? Mateo 25:31-40
Personal – Escribe en un papel las cosas que hayas hecho esta semana que indiquen que mueres (renuncias) a ti mismo. También escribe de que modo estás siguiendo a Jesús. Lee y medita Filipenses 2:3-5, y di un modo específico en el que deliberadamente pensaste en el interés de otro antes de tu propio interés.
QUINTO DIA LEE EL SALMO 63:2-6, 8-9
(“…te elogiaré con labios jubilosos.”)
Lee y medita en el Salmo 63:2-6, 8-9.
¿Qué te dice personalmente el Señor por medio de este Salmo?
¿Cómo puedes aplicar esto a tu vida diaria?
SEXTO DIA LEE TODO EL COMENTARIO
JEREMIAS 20:7-9
Jeremías fue un profeta que sirvió a Dios por más de 40 años. Su mensaje venia a una nación que había rechazado a Dios y que se iba resbalando de cabeza a la ruina. Jeremías era recordado como un entrometido y un traidor. La gente, nobles y reyes alternadamente trataban de matarlo. Jeremías había alcanzado el punto en el que si proclamaba la palabra de Dios, la gente se enojaba. No querían oír la verdad de sus labios porque la verdad los condenaba por sus pecados.
Jeremías era considerado “fuera de tiempo,” “no en la corriente de la teología de hoy,” y “pasado de moda.” Era el hazme reír de la región. Pero cuando el no proclamaba la Palabra de Dios debido al constante rechazo, su cuerpo entero se contraía y su corazón estaba como fuego ardiente. El estaba cansado de tratar de detenerse y de predicar lo que la gente quería oír. No podía hacerlo por que el llamado de la verdad era el llamado de Dios y el no iba a darle la espalda a ese llamado.
¿Hablas la santa verdad de Dios cuando estás entre tus amigos, o caes en la red y hablas de lo que crees que la gente quiere oír? Jeremías nunca sintió que era apto para ser un profeta, y nunca lo siguieron fanáticos que lo adoraran. El escogió continuar por que su corazón ardía como fuego por el Señor.
El pasaje de hoy es un mensaje tremendo de esperanza para todos los hijos de Dios y ese mensaje es que Dios te ama. El te formó en el vientre de tu madre y te conoce por tu nombre (Jeremías 1:4-7). No permitas que la voz del mundo sea tu guía.
Permite que el suave susurro de Dios que habló a Elías en la cueva sea la fuente de tus palabras. La gente se reirá y se burlará de ti hoy por proclamar la Palabra de Dios, pero está bien por que el Señor es nuestro pastor y nada nos falta (Salmo 23:1). El pastor siempre protege a su rebaño y nosotros tenemos un Pastor que nos ama tanto que hasta murió por nosotros.
ROMANOS 12:1-2
El llamado de Dios es muy firme en el mensaje del Nuevo Testamento. Te está llamando a creer en Su único Hijo, Jesús, y si lo crees tendrás vida eterna (Juan 3:16). Esta promesa ha sido hecha por Dios para todo el mundo. Aún así gran parte del mundo ha rechazado este mensaje lo cual nos impide vivir la vida en toda su plenitud.
¿Por qué gran parte del mundo no vive la vida en toda su plenitud (Juan 10:10) cuando hay tantos que saben acerca de Jesucristo? La respuesta es, el pecado. Por que para vivir la vida abundantemente debemos servir al Señor, Jesucristo. El mismo Jesús nos enseñó como ser un ejemplo de servicio, muriendo por nosotros en la cruz. Como queda dicho en esta lectura a los Romanos debemos “presentar nuestros cuerpos” en una rendición voluntaria a la voluntad de Dios. Dios debe controlar el uso de la persona toda y nosotros debemos presentar nuestros cuerpos como un santo y viviente sacrificio.
Estamos llamados a ser Templos del Espíritu Santo (1 Corintios 6:20) y debemos poner nuestra mirada en lo que está arriba (Colosenses 3:1-2). Tu templo del Espíritu Santo no incluye drogas, alcohol o fornicación. El mundo se ríe a la descripción de que tu seas un templo del Espíritu Santo, pero es el mismo Jesús quien te ordena llenarte con Su Espíritu Santo.
Ustedes mis amigos Cristianos han sido transformados por el poder de Dios y ya no forman parte del programa del mundo. Debido a que el Espíritu Santo vive en ti, ahora tienes el poder de someterte a la buena, aceptable y perfecta voluntad de Dios y disfrutarás de una vida que es física, emocional y espiritualmente plena. Permite a tu mente que sea renovada por la Santa Palabra de Dios, pasando un tiempo en oración silenciosa y en comunidad con otros Cristianos. Finalmente como describe enérgicamente el Salmista, “Paren y reconozcan que soy Dios” (Salmo 46:11).
MATEO 16:21-27
Ser discípulo es muy costoso y sin embargo es un costo al que no debemos renunciar. Un discípulo es un aprendiz que sigue las enseñanzas de su maestro. Jesús nos dice que si de verdad queremos seguirlo debemos tomar nuestra cruz y cargarla en Su nombre. Jesús tomó Su cruz y la cargó hasta el Calvario y permitió ser crucificado en la cruz por nosotros. El murió en Su cruz para que tú y yo podamos tener vida eterna.
Estás llamado a cargar tu cruz diariamente y a hacer las mismas cosas que Cristo hizo. Estás llamado a renunciar a ti mismo y poner a los otros antes que a ti (Filipenses 2:2-4). Cuando miramos alrededor vemos tantos alborotos en el mundo y la principal razón es que mucha gente no quiere levantar y cargar su cruz diariamente. La esencia del pecado está en nosotros mismos y el único modo de romper la esclavitud al pecado es renunciar a nosotros mismos. Es en la pérdida de nuestra vida por Cristo o en el renunciar a nosotros mismos que ocurre la salvación de nuestra vida. ¿”Por qué las cruces de algunas personas son mas pesadas que las de otras?” se pregunta mucha gente. Entre más que alguien renuncia a si mismo diariamente, lo mas que se aligera la cruz. Vemos personas pasando por horrendos sucesos en sus vidas y hay un sentir de paz interior y alegría. Esto pasa con una persona que se ha rendido al llamado de Cristo y ha dejado que el Señor se haga cargo de todas sus preocupaciones (1 Pedro 5:7).
Cuando cedemos al poder del Espíritu Santo, El nos da el poder de volvernos discípulos del Señor, Jesucristo. Así podemos salir y hacer de otros discípulos (Mateo 28:19) cuando aprendemos a renunciar a nosotros mismos y a vivir por Cristo. Morir por Cristo es muy noble, vivir por Cristo es mucho más difícil. Es necesario comprometerse diariamente. Debemos recordar que cualquier cosa que consigamos o nos pertenezca en esta vida terminará cuando nos muramos. Cuando renunciemos a nosotros mismos y recojamos nuestra cruz diariamente y vivamos para otros en Cristo, viviremos por siempre en la victoria con nuestro Señor y Salvador, Jesucristo.
Aplicación
La primera lectura nos muestra que la perseverancia es la virtud de un profeta. La segunda lectura nos dice que vivamos la vida abundante y nos llama a comprometer nuestra mente, cuerpo y alma. El Evangelio de esta semana nos dice que si queremos vivir para siempre debemos morir como Cristo si vamos a resucitar como Cristo.
Esta semana practiquemos la renuncia a nosotros mismos con nuestra familia de la siguiente manera: Padres de Familia – busquen un poco de tiempo diariamente para compartirlo con su cónyuge y con cada uno de sus hijos. Hijo – encuentra un tiempo cada día para servir algún miembro de tu familia por ejemplo ayudando a un hermano o hermana en sus quehaceres. Ayuden a sus padres en la casa o con algún dinero si ya están ancianos. Todos – Renuncien a si mismos en la escuela o en el trabajo para escuchar a otros y realmente oír lo que ellos tengan que decir.
Recuerden, perder la vida por Cristo es la mejor manera de resucitar con Cristo.