DECIMOTERCER DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO-A

DECIMOTERCER DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

ANTES DE COMENZAR:

Ora y pídele a Dios que te hable a través de Su Espíritu Santo. “EL ESPIRITU SANTO INTERPRETE, QUE EL PADRE LES ENVIARA EN MI NOMBRE, LES VA A ENSEÑAR TODAS LAS COSAS Y LES RECORDARA TODAS MIS PALABRAS.”  (JUAN 14:26)

PRIMER DIA  Vuelve a leer las lecturas de la semana pasada.

  1. ¿Cuál fue el mensaje qué recibiste de la homilía o de las lecturas que oíste en misa el domingo?

 

  1. ¿De lo que aprendiste, qué escogiste para aplicar a tu vida esta semana?

 

SEGUNDO DIA                                2 REYES 4:8-11, 14-16            PRIMERA LECTURA

(“Yo sé que él es un santo varón de Dios.”)

 

  1. ¿Quién vino a Sunem y quién le suplicó a él que cenara con ella? 2 Reyes 4:8

 

  1. ¿Qué tan seguido cenó él con la mujer? 2 Reyes 4:8

 

  1. ¿A quién siguió Eliseo y qué fue puesto a su cargo? 2 Reyes 1:9-15

 

  1. ¿Cómo le llama la mujer Sunamita a Eliseo? 2 Reyes 4:9

 

  1. ¿Qué recibe la persona que atiende a un profeta o a un hombre santo? Mateo 10:41-42

 

  1. ¿En qué deberemos ser generosos? Romanos 12:13

 

  1. ¿Qué dispuso la mujer para Eliseo? 2 Reyes 4:10

 

  1. ¿Qué hizo un tiempo después Eliseo? 2 Reyes 4:11

 

  1. ¿Qué le preguntó Eliseo a su sirviente Guejazi y qué le contestó? 2 Reyes 4:14

 

  1. ¿Eliseo le pidió a su sirviente que llamara a la mujer, y mientras estaba parada en la puerta, ¿qué le prometió a ella? 2 Reyes 4:15-16

 

  1. ¿Qué dijo ella y cómo llamó a Eliseo? 2 Reyes 4:16

 

Personal – ¿Cuál es tu actitud cuando un sacerdote viene a tu casa?  ¿Cuál es tu actitud acerca de lo que te dice?  ¿De qué manera muestras hospitalidad a los escogidos de Dios?

 

TERCER DIA                                   ROMANOS 6:3-4, 8-11            SEGUNDA LECTURA

(“La muerte de Cristo fue un morir al pecado, y un morir para siempre.”)

 

  1. ¿Nosotros que hemos sido bautizados en Jesucristo, en que más hemos sido bautizados?     Rom. 6:3

 

  1. ¿Con qué han sido arropados los que han sido bautizados en Cristo? Galatas 3:27

 

  1. En el bautismo no solamente fuimos enterrados con El sino también resucitados con El, y eso gracias a quién? Col. 2:12

 

  1. Así como Cristo fue resucitado de los muertos para la gloria del Padre, ¿qué hacemos nosotros también? Romanos 6:4

 

  1. ¿Qué creemos nosotros si hemos muerto con Cristo, Romanos 6:8?

 

  1. ¿Después de haber resucitado de los muertos, podrá la muerte hacer algo contra Cristo?       Rom. 6:9

 

  1. ¿Quién será el último enemigo que será destruido? 1 Corintios 15:26

 

  1. ¿Para qué fue la muerte de Cristo y para quién es Su vida? Romanos 6:10

 

  1. ¿Por quién murió El? Romanos 6:10

 

  1. ¿De la misma manera, a que nos consideramos nosotros muertos? Romanos 6:11

 

  1. ¿Para quien viviremos y en quien? Romanos 6:11

 

Personal – ¿De qué manera has muerto al pecado en tu vida?  ¿De que manera estas viviendo una vida para Dios?

 

CUARTO DIA                                       MATEO 10:37-42                               EVANGELIO

(“El que los recibe a ustedes, a mi me recibe, y el que me recibe a mi, recibe al que me envió.”)

 

  1. ¿Quién está hablando en los versículos 37-42 de Mateo y a quién le está hablando? Mateo 10:5 y Mateo 11:l

 

  1. ¿Qué dijo Dios acerca de esos que aman a su padre o madre, o hijo o hija más que a El? Mateo 10:37

 

  1. ¿Si un hombre desea seguir a Jesús, cuáles son las tres cosas que deberá hacer?    Mateo 16:24

 

  1. ¿Quién no es digno de seguir a Cristo? Mateo 10:38

 

  1. ¿Qué le pasará al que procure salvar su vida y qué al que la sacrifique? Mateo 10:39 y        Marcos 8:35

 

  1. ¿A quién recibe la persona que te recibe, y ese que recibe a El, a quien más recibe?          Mateo 10:40

 

  1. ¿Qué recibe la persona que recibe con amabilidad a un profeta porque tiene este nombre?             Mateo 10:41

 

  1. ¿Qué recibe la persona que recibe con amabilidad a una persona buena porque es conocida como tal? Mateo 10:41

 

  1. ¿Qué nos promete Jesús, y a quién le llama discípulo? Mateo 10:42

 

  1. ¿Qué le sucederá a la persona que te dé agua para beber porque perteneces a Cristo? Marcos 9:41

 

Personal – ¿Cuál ha sido la cruz que has tomado para poder seguir a Cristo?  ¿De qué manera te niegas a ti mismo diariamente en tu casa, trabajo, o escuela?  ¿En qué forma estás apoyando a tus hermanos o hermanas en el Señor que están siguiendo a Jesús?

 

QUINTO DIA                                LEE SALMO 89:2-3, 16-19

(“Los favores del Señor cantaré para siempre.”)

 

Lee y medita en el Salmo 89:2-3, 16-19.

 

¿Qué te dice personalmente el Señor por medio de este Salmo?

 

¿Cómo puedes aplicar esto a tu vida diaria?

 

SEXTO DIA                              LEA TODO EL COMENTARIO

2 REYES 4:8-11, 14-16

Este pasaje nos revela la necesidad de mostrar hospitalidad y respeto a los escogidos de Dios, Su clero.  Cuando un sacerdote o diácono viene a tu casa, ¿cómo es tu actitud, es amable, cariñosa y reverente?  Las Escrituras nos dicen que esos que han recibido el mensajero del Rey podrán, en realidad, estar recibiendo el Rey mismo (Mateo 10:40-42).  Los Judíos siempre pensaron que recibir al mensajero de una persona era lo mismo que recibir a la persona misma.  Recibir con amor y cariño al mensajero de nuestro Señor Jesús es lo mismo que recibir a Jesús mismo.

Las mujeres Sunamitas sabían que Elías era un profeta y un mensajero especial de Dios y confiaban en él con mucho respeto.  El le prometió el regalo de un hijo y ella recibió este milagro de Dios por medio del Profeta que respetaba muchísimo.

Hoy en día hay mucha falta de respeto hacia el clérigo de las denominaciones Cristianas.  Mucha gente no se fija a quién realmente estas personas están representando.  Hay faltas del clero que cae en pecado, pero de todas maneras han sido llamados a representar al Señor.  David fue maltratado por Saúl el Rey, terriblemente, pero éste nunca lastimó a Saúl.  David respetaba el oficio de Saúl.  Dios recompensó a David por su compasión, respeto y obediencia.  Dios llamó a David un “hombre detrás de mi propio corazón.”

Fíjate en los clérigos de tu propia parroquia y ve en que les puedes ayudar, alentar, pero primordialmente, ámalos.  Puedes amarlos al orar por ellos diariamente y al invitarlos a tu casa para que compartan con ustedes su hospitalidad.  Elías estaba asombrado de la mujer Sunamita y de su hospitalidad. Hoy en día nuestros clérigos necesitan también esa hospitalidad y que los aceptes totalmente.  Jesús dijo, “Lo que ustedes hagan al más pequeño de mis hermanos y hermanas, lo hacen a mi” (Mateo 25:31-46).  Esto también aplica a esas personas que han dejado la comodidad de una familia cariñosa y la seguridad de una casa y comunidad permanente y han salido a servir a un mundo hostil.  Como tratemos nosotros al clero es claramente como tratamos a Nuestro Señor, Jesús.  Recuerden, ellos son mensajeros del Rey.

ROMANOS 6:3-4, 8-11

El poder del pecado se rompe con la muerte y resurrección de Jesucristo.  Su muerte destrozó el poder de nuestra naturaleza pecadora.  Nuestra vieja naturaleza que ama al pecado fue enterrada con Jesús por el bautismo cuando El murió por nuestros pecados.  Por medio del bautismo compartimos su nueva vida y resucitaremos así como El lo hizo.  El bautismo significa someterse y ahogarse.  Morimos a nuestra vieja-pecadora naturaleza y emergemos o resucitamos en el bautismo con el Cristo Resucitado.  Hemos invitado a Cristo para que resida en nosotros.  El, a su vez, nos invita a su Familia Santa de Cristiandad, y está presente en su Padre Celestial y el Espíritu Santo.  Por medio del bautismo nos convertimos en hijos e hijas de Dios el Padre y gozamos el poder del Espíritu Santo y vivimos y amamos a otros en el nombre de Jesucristo.

En la iglesia en el tiempo de Pablo, la sumersión era la forma usual del bautismo.  Eso significa que los nuevos Cristianos eran totalmente sumergidos en agua.  Esto era un símbolo de la muerte y enterramiento de la vida antigua, seguida con la resurrección a la vida con Cristo.  Es muy importante comprender porqué el bautismo es tan importante en ser un Cristiano.  Somos limpiados del pecado y arropados en el poder del Espíritu Santo.  Este es el poder que nosotros usamos para resistir al diablo y hacer que se aleje de nosotros (Santiago 4:7).  Ahora tenemos el poder increíble de escoger la vida en vez de la muerte porque tenemos la presencia del Espíritu Santo en nosotros.  Sabemos que el Espíritu dentro de nosotros es mucho mas poderoso que el que está en el mundo (1 Juan 4:4).  Por la razón de nuestro bautismo hemos sido hijos e hijas adoptados del Rey.  Jesús nos dice que El ha preparado un lugar especial en la casa de su Padre para cada uno de nosotros (Juan 14:1-6).  Este pasaje nos da un gran consuelo y la seguridad como creyentes en Jesucristo.  Por Jesús, nunca tenemos que temer la muerte o pensar a donde iremos cuando nos muramos (Juan 3:16).

MATEO 10:37-42

El evangelio de hoy nos dice que un compromiso Cristiano podrá separar a amigos y seres queridos. Jesús nos enseñó que su presencia demanda una decisión.  Esto era cierto en el tiempo de Jesús y es especialmente verdadero en el mundo de hoy.  Dos cosas están sucediendo ahora. O el mundo te está cambiando a ti o tú estás cambiando el mundo.  Una decisión para Cristo es una decisión en hacer el mundo un lugar mejor para vivir.

Al levantar nuestra cruz y seguir a Jesús, un conflicto inevitable seguirá.  Nuestros diferentes valores morales, metas y propósitos nos apartarán de otros.  El mensaje de hoy es que Dios deberá ser tu prioridad, no los amigos, o la familia.  Dios nos ha llamado para una misión más grande que el encontrar la comodidad en la vida.  Al levantar la cruz y seguir a Jesús debemos dejar otras prioridades.  Debemos estar totalmente comprometidos a Dios (Mateo 10:39) y dispuestos a enfrentar lo que sea, hasta sufrir la muerte por el amor a Cristo.  Podemos ver alrededor de nosotros que, cuando la gente tiene las recompensas de la vida (placer, poder, popularidad) lo más que descubre es que vacíos están.

La Madre Teresa tiene un dicho que dice, “A menos de que la vida sea vivida por otros, no vale la pena”.  Podemos saber cuanto amamos a Dios en el modo como tratamos a otros.  Dios reconoce todas las buenas cosas que haces o que no haces, como si El fuera el que las estuviera recibiendo.  No podemos ser todos profetas y proclamar la palabra de Dios, pero el que da al mensajero de Dios, el simple regalo de la hospitalidad, recibirá un regalo tan bueno como el del profeta mismo.  Necesitamos recordar que también el profeta necesita su desayuno y su ropa limpia.  No olvidemos amar, honrar y dar gracias a esas personas a las cuales a veces no se les damos las gracias, cuando hacen la comida en la casa, la limpian, lavan la ropa, compran la provisión y cuidan a los niños.  Es el más grande quehacer de Dios y será mas probable que ellos reciban la recompensa del profeta, que aquellos que sus días están llenos de comités y casas cómodas.

Aplicación

La primera lectura nos enseña a honrar y respetar al clero.  La segunda lectura nos enseña que el poder del pecado es roto por medio del bautismo.  El Evangelio nos dice que nuestra prioridad es amar a Dios.

Esta semana, permitan que sea una semana de amar a Dios por medio de amar a otros.  Esposos, lleven a su esposa a cenar o a un lugar donde ella descanse y goce.  Esposos, cuiden a los niños para que mamá pueda tomar unas horas para relajarse y mimarse ella misma.  Esposas, tomen tiempo para estar a solas con su esposo.  Niños ayuden a sus padres en limpiar lo que ensucian y hagan mandados para sus mamás.  Familias, oren todos los días dándole gracias a Dios e inviten a su sacerdote o diácono a sus hogares para orar y relajarse con ustedes.

THIRTEENTH SUNDAY IN ORDINARY TIME – CYCLE A

THIRTEENTH SUNDAY IN ORDINARY TIME – CYCLE A

BEFORE YOU BEGIN

 

Pray and ask God to speak to you through His Holy Spirit.

“THE PARACLETE, THE HOLY SPIRIT WHOM THE FATHER WILL SEND IN MY NAME, WILL INSTRUCT YOU IN EVERYTHING, AND REMIND YOU OF ALL THAT I TOLD YOU.” (JOHN 14:26)

FIRST DAY Reread last week’s readings.

  1. What was a helpful or new thought from the readings or from the homily you heard on Sunday?

 

  1. From what you learned, what personal application did you choose to apply to your life this week?

 

SECOND DAY        READ 2 KINGS 4:8-11, 14-16    FIRST READING

(“I know that he is a holy man of God.”)

 

  1. Who came to Shunem, and who urged him to dine with her? 2 Kings 4:8

 

  1. How often did he dine with the woman? 2 Kings 4:8

 

  1. Whom did Elisha succeed, and what was to rest on him? 2 Kings 2:9-15

 

  1. What did the Shunammite woman call Elisha? 2 Kings 4:9

 

  1. What does he who welcomes a prophet or a holy man receive? Matthew 10:41-42

 

  1. In what should we be generous? Romans 12:13

 

  1. What did the woman arrange for Elisha? 2 Kings 4:10

 

  1. What did Elisha do sometime later? 2 Kings 4:11

 

  1. What did Elisha ask his servant Gehazi, and what did he say? 2 Kings 4:14

 

  1. Elisha told his servant to call the woman, and as she stood at the door, what did he promise her?   2 Kings 4:15-16

 

  1. What did she say, and what did she call Elisha? 2 Kings 4:16

 

Personal – What is your attitude when a priest comes to your home? What is your attitude toward what he says to you? In what way do you show hospitality to God’s chosen ones?

 

THIRD DAY           READ ROMANS 6:3-4, 8-11     SECOND READING

(“His death was death to sin, once for all;”)

  1. We who have been baptized into Jesus Christ, into what have we also been baptized?   Romans 6:3

 

  1. With whom have all who have been baptized into Christ clothed them­selves? Gal 3:27

 

  1. In baptism we were not only buried with him but also raised to life with Him because of what? Col 2:12

 

  1. Just as Christ was raised from the dead by the glory of the Father, what might we live?   Romans 6:4

 

  1. What do we believe if we have died with Christ? Romans 6:8

 

  1. What will Christ, once raised from the dead, never do again? Romans 6:9

 

  1. What was the last enemy to be destroyed? 1 Corinthians 15:26

 

  1. For what was Christ’s death and for whom is his life? Romans 6:10

 

  1. For whom did he die? Romans 6:10

 

  1. In the same way, to what must we consider ourselves dead? Romans 6:11

 

  1. For whom and in whom are we alive? Romans 6:11

 

Personal – In what way have you died to sin in your life? In what way are you living a life for God?

 

FOURTH DAY           READ MATTHEW 10:37-42              GOSPEL

(“He who welcomes me, welcomes him who sent me.”)

 

  1. Who is speaking in verses 37-42 of Matthew, and to whom is he speaking?  Matthew 10:5 , Matthew 11:1

 

 

  1. What did Jesus say about those who love father or mother, son or daughter more than him? Matthew 10:37

 

  1. If a man wishes to come after Jesus, what three things must He do?   Matthew 16:24

 

  1. He who will not take up what and come after him is not worthy of whom? Matthew 10:38

 

  1. To what does he who seeks only himself bring himself, and how does a person discover who he is?  Matthew 10:39, Mark 8:35

 

  1. Whom does he welcome who welcomes us, and he who welcomes him also welcomes whom?   Matthew 10:40

 

  1. What does he receive who welcomes a prophet because he bears the name of prophet?   Matthew 10:41

 

  1. What does he receive who welcomes a holy man because he is known as a holy man?   Matthew 10:41

 

  1. What does Jesus promise us, and what does he call a disciple?   Matthew 10:42

 

  1. What will happen to any man who gives a drink of water to you because you belong to Christ?   Mark 9:41

 

Personal – What is the cross that you have taken up in order to follow Christ? In what ways do you die to yourself on a daily basis in your home, at work, or at school? In what way are you supportive to your brothers and sisters in the Lord who are following Jesus?

 

FIFTH DAY          READ PSALM 89:2-3, 16-19

(“The favors of the Lord I will sing forever.”)

 

Read and meditate on Psalm 89:2-3, 16-19.

 

What is the Lord saying to you personally through the Psalm?

 

How can you apply this to your life?

 

SIXTH DAY         READ ALL OF THE COMMENTARY

2 KINGS 4:8-11, 14-16

This passage reveals to us the need to show hospitality and respect to God’s chosen ones, his clergy. When a priest or deacon comes into your home, is your attitude loving, caring, and reverent? The Scriptures tell us that he who received the king’s messenger will, in reality, be receiving the king himself (Matt. 10:40-42). The Jews always felt that to receive a person’s messenger was the same as to receive the person himself. To welcome with love the messenger of our Lord Jesus was the same as to welcome Jesus himself.

The Shunemite woman knew that Elisha was a prophet and a special messenger of God and she trusted him with great respect. He promised her a gift of a son and she received this miracle of God from the prophet she respected so much.

Today there is a great amount of disrespect shown toward the clergy of Christian denominations. Many people fail to look at whom these people represent. There are failures among the clergy who fall into sin, but they still have been called to represent the Lord. David was terribly mistreated by Saul the King, but David never harmed a hair on Saul’s head. David respected the office of what Saul represented. God rewarded David for this compassion, respect, and obedience. God called David a “man after my own heart.”

Look at the clergy in your parish and see where you can help them, encourage them, but most of all, love them. You can love your clergy by praying for them daily and by inviting them to your home to share your lifestyle and hospitality. Elisha was amazed at the Shunemite woman’s hospitality, and today, our clergy need that hospitality and acceptance very much. Jesus said, “What you do to the least of my brethren, you do unto me.” (Matt 25:31-46). This verse also applied to those who had given up the comfort of a loving family and the security of a permanent home and community and have gone out to serve a hostile world. How we treat our clergy is very well indeed how we treat Our Lord, Jesus. Remember, they are messengers of the King.

ROMANS 6:3-4, 8-11

The power of sin is broken through the death and resurrection of Jesus Christ. His death shattered the power of our sinful nature. Our old sin-loving nature was buried with Jesus by baptism when he died for our sins. Through baptism, we share his new life, and we shall rise as he did. Baptism means to sink, submerge, and to drown. We die to our old sinful nature and we emerge or rise in baptism with the Risen Christ. We have invited Christ to take up residence in us. He, in turn, welcomes us into his Holy Family of Christianity. He is present in his Heavenly Father and the Holy Spirit. Through baptism we become sons and daughters of God the Father and enjoy the power of the Holy Spirit and live and love others in the name of Jesus Christ.

In the church of Paul’s time, immersion was the usual form of baptism. This means that new Christians were completely buried in water. This symbolized the death and burial of the old way of life, followed by resurrection to life with Christ. It is very important to realize why baptism is so important to being a Christian. We are cleansed of sin and clothed in the power of the Holy Spirit. This is the power that we use to resist the devil and make him flee from us (James 4:7). We now have the incredible power to choose life over death because we have the presence of the Holy Spirit within us. We know that the Spirit within us is far more powerful than he that is in the world (l John 4:4). Because of our baptism we have become adopted sons and daughters of the King. Jesus tells us that he has prepared a place in his Father’s house for each one of us (John 14:1-6). This passage gives us tremendous comfort and assurances as believers in Jesus Christ. Because of Jesus, we never need to fear death or wonder where we will go when we die (John 3:16).

MATTHEW 10:37-42

Today’s Gospel message tells us that a Christian commitment may separate friends and loved ones. Jesus showed that his presence demands a decision. This was true in Jesus’ time, and it is especially true in today’s world. Two things are happening today. Either the world is changing you or you are changing the world. A decision for Christ is a decision to make the world a better place to live.

As we take up our cross and follow Jesus, an inevitable conflict will follow. Our different values, morals, goals, and purposes will set us apart from others. Today’s message is that God should be our first priority, not friends or even family. God has called all of us to a higher mission than to find comfort in this life. To take up our cross and follow Jesus we must lay down other cares and priorities. We need to be totally committed to God (Matt. 10:39) and willing to face anything, even suffering and death, for the sake of Christ. We can see around us that the more people love this life’s rewards (leisure, power, popularity), the more they discover how empty they are.

Mother Teresa has a saying, “Unless life is lived for others, it is not worthwhile.” We can tell how much we love God by how well we treat others. God notices every good deed we do or don’t do, as if he were the one receiving it. We cannot all be prophets and proclaim the Word of God, but he who gives God’s messenger the simple gift of hospitality will receive no less a reward than the prophet himself. We must remember that even the prophet must get his breakfast and attend to his clothes. We must never forget to love, honor, and thank those who have the often thankless task of making a home, cooking meals, washing clothes, shopping for household items, and caring for children. It is God’s greatest task, and they will be far more likely to receive the prophet’s rewards than those whose days are filled with committees and comfortable homes.

Application

The first reading teaches us to honor and respect the clergy. The second reading shows us that the power of sin is broken through baptism. The Gospel tells us that our first priority is loving God.

Let this week be a week of loving God by loving others. Husbands, take your wife out to dinner or some where to relax and enjoy. Husbands, watch the children so Mom can take a few hours to relax and pamper herself. Wives, take time to be present to your husband alone. Children, help your parents by cleaning up after yourself and do some errands for Mom. Parents, take time to play with your children and each other. Families, pray every day to God in thanksgiving and invite your priests or deacon to your home to pray and relax with you.

 

12th Sunday in Ordinary Time – A – Lectio Divina

12th Sunday in Ordinary Time – A

PURPOSE OF THIS SCRIPTURE READING – Develop a personal relationship with Jesus through the Word of God with the understanding that the Holy Spirit will teach and remind us of all Jesus said and did. Psalm 32:8 tells us, “I will instruct you and show you the way you should walk, give you counsel and watch over you.”

  1. Say the opening prayer
  2. Read the passage slowly three times as though Jesus were talking to you.
  3. Converse with Jesus, asking questions and listening to Him.

OPEN WITH THE FOLLOWING PRAYER:

 Father, I can’t understand Your Word without Your grace, I acknowledge my weakness so Your power can reach perfection in me. Send Your Holy Spirit to remind, teach, and guide me to the Truth. May I share as soon as possible whatever You teach me. AMEN

 

READ, REFLECT AND WRITE – Matthew 10:26-33 – Jesus said to the Twelve: “Fear no one. Nothing is concealed that will not be revealed, nor secret that will not be known. What I say to you in the darkness, speak in the light; what you hear whispered, proclaim on the housetops. And do not be afraid of those who kill the body but cannot kill the soul; rather, be afraid of the one who can destroy both soul and body in Gehenna. Are not two sparrows sold for a small coin? Yet not one of them falls to the ground without your Father’s knowledge. Even all the hairs of your head are counted. So do not be afraid; you are worth more than many sparrows. Everyone who acknowledges me before others I will acknowledge before my heavenly Father. But whoever denies me before others, I will deny before my heavenly Father.”

 

  1. What is the Lord personally saying to you?

2.What does the Lord personally want you to do?

 

Share your reflection with someone.

DECIMOSEGUNDO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO – CICLO A

DECIMOSEGUNDO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

ANTES DE COMENZAR:

Ora y pídele a Dios que te hable a través de Su Espíritu Santo. “EL ESPIRITU SANTO INTERPRETE, QUE EL PADRE LES ENVIARA EN MI NOMBRE, LES VA A ENSEÑAR TODAS LAS COSAS Y LES RECORDARA TODAS MIS PALABRAS.”  (JUAN 14:26)

PRIMER DIA  Vuelve a leer las lecturas de la semana pasada.

 

  1. ¿Cuál fue el mensaje qué recibiste de la homilía o de las lecturas que oíste en misa el domingo?

 

  1. ¿De lo que aprendiste, qué escogiste para aplicar a tu vida esta semana?

 

SEGUNDO DIA                              LEE JEREMIAS 20:10-13          PRIMERA LECTURA

(..”que salvó al desamparado de las manos de los malvados.”)

 

  1. ¿Qué oyó Jeremías y que esperaban ver los que antes lo saludaban? Jeremías 20:10

 

  1. ¿Qué hará un amigo falso? Eclesiástico 37:4

 

  1. ¿Qué hacen los amigos de ocasión? ¿De quién debemos cuidarnos?  Eclesiástico 6: 8-13

 

  1. ¿Quién está con Jeremías? ¿Qué les pasará a los que lo persiguen?  Jeremías 20:11

 

  1. ¿Qué le dijo el Señor a Jeremías? Jeremías 1:8, Jeremías 15:20

 

  1. ¿De qué están lejos los que persiguen cruelmente? Salmo 119:150

 

  1. ¿De qué está pendiente y qué conoce el Señor? ¿Qué pide Jeremías poder ver?

Jeremías 20:12

 

  1. ¿Por qué escudriña el corazón y sondea las entrañas el Señor? Jeremías 17:10

 

  1. ¿A quién debemos cantar y alabar y a quién ha rescatado? Jeremías 20:13

 

  1. ¿Por qué damos gracias y alabamos al Señor? Salmo 109:30-31

 

Personal – ¿De qué modo te ha rescatado el Señor de alguien que tú creías era tu amigo?  ¿Cómo le cantas alabanzas por lo que ha hecho por ti?

 

TERCER DIA                                  LEE ROMANOS 5:12-15          SEGUNDA LECTURA

(“La gracia hizo más que reparar la caída….”)

 

  1. ¿Qué entró al mundo por un solo hombre? ¿Qué se propagó a toda la humanidad?  ¿Debido a qué?   Romanos 5:12

 

  1. ¿A través de qué entró la muerte al mundo? ¿Quién la padecerá?  Sabiduría 2:24

 

  1. ¿Qué hacen la envidia y la ira? Eclesiástico 30:24

 

  1. ¿Qué pasaba con el pecado cuando todavía no había ley? ¿Por lo tanto de qué no se podía hablar?   Romanos 5:13

 

  1. ¿Qué es lo propio de la ley? ¿Cuándo no hay delito?  Romanos 4:15

 

  1. ¿Qué reinó desde Adán hasta Moisés? ¿Quién muere a pesar de no haber pecado?  ¿Qué hizo Adán?   Romanos 5:14

 

  1. ¿Qué pasa por ser de Adán y que pasa por ser de Cristo? 1 Corintios 15:22

 

Personal – ¿Cómo ha afectado el pecado y la muerte, tu vida?

 

  1. ¿Qué hizo la gracia? Romanos 5:15

 

  1. ¿Qué desbordó sobre las muchedumbres? Romanos 5:15

 

  1. ¿Cómo creemos que hemos sido salvados? Hechos 15:11

 

Personal – ¿Cómo ha afectado tu vida la gracia de Dios?  ¿Qué significa la gracia para ti?  ¿De acuerdo contigo cuál es el resultado que tiene la gracia en otros?

 

CUARTO DIA                                   LEE MATEO 10:26-33                           EVANGELIO

(“No teman a los que solo pueden matar el cuerpo, pero no el alma.”)

 

  1. ¿Qué no debemos sentir? ¿Qué será descubierto?  ¿Qué será revelado?  Mateo 10:26

 

  1. ¿Lo que Jesús nos dice a obscuras, cómo debemos repetirlo? ¿Y lo que nos dice al oído, cómo debemos decirlo?  Mateo 10:27

 

Personal – ¿Cuando el Señor te habla en tus momentos de oración a solas, cómo se lo haces saber a otros?

 

  1. ¿Qué le pasa a la persona que no habla? Salmo 32:3

 

  1. ¿A quién no debemos temer y a quién sí? Mateo 10:28

 

  1. ¿Qué no debemos repetir asustados? ¿A quién debemos temer y respetar?   Isaías 8:12-13

 

  1. ¿Qué no cae a la tierra si el Padre no lo permite? Mateo 10:29

 

  1. ¿Hasta qué ha sido contado? ¿Por qué no debemos temer?  Mateo 10:30-31

 

  1. ¿Qué nos sucederá a causa de Jesús? ¿Qué no se perderá?  ¿Cómo nos salvaremos?

Lucas 21:17-19

 

  1. ¿Qué no debemos temer? Isaías 51:7

 

  1. ¿Quién será reconocido delante del Padre Celestial? ¿Quién será negado de la misma forma?   Mateo 10:32-33

 

  1. ¿Qué le pasará al que se avergüence de Jesús y de sus palabras en medio de la gente adúltera y pecadora? Marcos 8:38

 

Personal– ¿De qué modo has reconocido a Jesús y a sus palabras delante de tu familia, amigos, compañeros de escuela o de trabajo?

 

QUINTO DIA                         LEE SALMO 69:8-10, 14, 17, 33-35

(“Pues así el Señor escucha al pobre.”)

Lee y medita en el Salmo 69:8-10, 14, 17, 33-35.

 

¿Qué te dice personalmente el Señor por medio de este Salmo?

 

¿Cómo puedes aplicar esto a tu vida diaria?

 

SEXTO DIA                               LEE TODO EL COMENTARIO

JEREMIAS 20:10-13

Jeremías va derecho del valle de Ben Hinón hacia el templo y con su mensaje desafía la conducta social y moral de la gente.  El no tenía miedo de hacer críticas impopulares.  La gente podría obedecerlo o silenciarlo y escogieron lo último.  Sus falsos profetas les dijeron lo que ellos querían escuchar.  El sacerdote encargado llamado Pasjur, oyó las palabras de Jeremías y debido a su conciencia culpable lo forzó y lo mandó apalear sujetándolo con cadenas y ridiculizándolo en frente de toda la comunidad.  Jeremías llora ante Dios. Pero ni estas cosas lo detienen de proclamar la palabra de Dios.

El papel de Jeremías como profeta le puso bajo una presión terrible.  El proclamaba fielmente la palabra de Dios y no recibía nada en cambio, sólo persecución y penas.  El trató de no decir la palabra de Dios, pero se le venia como un fuego en los huesos.

Hoy, hay muchos lugares donde la gente necesita ser enfrentada sobre su conducta moral.  Los Jeremías de hoy son ridiculizados y silenciados y los falsos profetas “les dicen música a sus oídos” diciéndoles qué maravillosos son.  Cuando estés pendiente de un hilo, recuerda no hay final en la esperanza.  Sentirás “el fuego en tus huesos” y te sentirás forzado a compartirlo con otros, en cualquier situación.

ROMANOS 5:12-15

La pregunta, “¿Cómo es posible que se nos declare culpables de algo que Adán hizo hace miles de años”, sigue indignando a la gente.  Hay muchos que dicen que no es justo que Dios no juzgue por el pecado de Adán, pero cada uno de nosotros se parece a Adán pues todos hemos pecado.  Todos estamos hechos de “la misma madera”, rebeldes, exagerando nuestras actitudes y nuestros prejuicios.  Somos juzgados por los pecados que nosotros cometemos pues somos pecadores.  No es justicia lo que necesitamos, es misericordia.

Pablo nos dice una vez más que cumplir la ley no nos trae la salvación.  La muerte es el resultado del pecado de Adán y de los pecados que nosotros cometemos.  La ley fue añadida para ayudar a la gente a darse cuenta de sus pecados y para mostrarles la seriedad de sus ofensas y acercarlos a Dios para alcanzar misericordia y perdón.  Todo esto era verdad en tiempos de Moisés y lo es todavía hoy en día.  El pecado es una ruptura profunda entre lo que somos y lo que fuimos creados para ser.  La ley señala nuestros pecados y pone nuestra responsabilidad sobre nuestros hombros, pero no ofrece el remedio.

En muchas naciones las prisiones están saturadas por que la responsabilidad requiere disciplina y la disciplina requiere obligarse a hacer algo.  Cuando somos declarados culpables de algún pecado, la única manera de limpiarnos es por medio de Jesucristo.  Recordemos, solo la verdad podrá hacernos libre (Juan 8:32) y la verdad es nuestro Señor y salvador Jesucristo.

MATEO 10:26-33

El Evangelio de hoy nos revela, el costo de seguir a Jesucristo.  Jesús ayudó a sus discípulos a prepararse para el rechazo que experimentarían por el hecho de ser Cristianos.  Cuando se es persona de Dios muchas veces se crean reacciones por parte de aquellos que lo resisten.  Los discípulos las pasaron duras no solo con el gobierno, las cortes, etc. sino también con los amigos y familiares.

El vivir por Dios trae pruebas y problemas, pero de la misma manera viene la oportunidad de hablar de las Buenas Nuevas de Salvación.  Siempre podemos confiar en Jesús, pues El “ha vencido al mundo” (Juan 16:33), y es esencial que recordemos que aquellos que “perduren hasta el final”, serán salvados (10:22).

Tú vales mucho para Dios y nunca te pierde de su vista o de su alcance.  No temas las amenazas o las pruebas difíciles pues éstas no te quitarán el amor de Dios ni Su Espíritu.

Para Dios cada uno de nosotros vale muchísimo, El nos permite escoger y tener la oportunidad de decirle “No, Señor.”  Entre más que te acerques a Dios, el mundo te rechazará y abusará más de ti.  Ellos odiaban a Cristo y lo rechazaron; ¿Podremos esperar nosotros algo menos que eso?

Los que se mantengan firmes por Cristo a pesar de sus dificultades, verdaderamente tendrán un valor perdurable y recibirán el reconocimiento y amor de Dios y éste los sostendrá a través de cualquier prueba.

Aplicación

La primera lectura nos dice que la palabra de Dios es como un martillo que despedaza las rocas que obstaculizan.  La segunda lectura nos dice que la muerte es el resultado del pecado de Adán y la vida es el resultado del sacrificio de Cristo en la cruz.  El Evangelio revela que el miedo no sirve y que debemos confiar en Dios.

Esta semana, pregúntate qué estás haciendo para ser testigo de tu fe.  ¿Cómo has respondido al azote de los abortos en tu comunidad?  Ve si puedes ayudar de algún modo, tal vez escribiendo cartas a las autoridades, protestando, orando, votando por asuntos morales concernientes al aborto.  Serás ridiculizado, atacado social, emocional, espiritualmente y tal vez hasta físicamente por tu lealtad y tus creencias.

Esta semana vuélvete un discípulo de Cristo y deja que el Espíritu que está dentro de ti te recuerde que el espíritu de este mundo ha sido vencido.

TWELFTH SUNDAY IN ORDINARY TIME – CYCLE A

TWELFTH SUNDAY IN ORDINARY TIME – CYCLE A

BEFORE YOU BEGIN

Pray and ask God to speak to you through His Holy Spirit.

“THE PARACLETE, THE HOLY SPIRIT WHOM THE FATHER WILL SEND IN MY NAME, WILL INSTRUCT YOU IN EVERYTHING, AND REMIND YOU OF ALL THAT I TOLD YOU.” (JOHN 14:26)

FIRST DAY Reread last week’s readings.

  1. What was a helpful or new thought from the readings or from the homily you heard on Sunday?

 

  1. From what you learned, what personal application did you choose to apply to your life this week?

 

SECOND DAY          READ JEREMIAH 20:10-13      FIRST READING

(“For he has rescued the life of the poor from the power of the wicked.”)

  1. What does Jeremiah hear, and for what are those who were his friends on the watch?   Jeremiah 20:10

 

  1. What will a false friend do? Sirach 37:4

 

  1. What will a friend do who is a friend when it suits him, and with whom are we to be on guard?   Sirach 6:8-13

 

  1. Who is with Jeremiah, and what will happen to his persecutors?      Jeremiah 20:11

 

  1. What did the Lord say to Jeremiah? Jeremiah 1:8, Jeremiah 15:20

 

  1. From what are malicious persecutors far? Psalm 119:150

 

  1. What does the Lord test and probe, and what does Jeremiah ask to witness? Jeremiah 20:12

 

  1. Why does the Lord probe the mind and test the heart? Jeremiah 17:10

 

  1. To whom should we sing and praise, and whom has he rescued?   Jeremiah 20:13

 

  1. Why do we thank and praise the Lord? Psalm 109:30-31

 

Personal – How has the Lord rescued you from someone you thought was a friend? In what way do you sing his praises for what he has done for you?

 

THIRD DAY             READ ROMANS 5:12-15        SECOND READING

(“But the gift is not like the transgression.”)

 

  1. What entered the world through one man, what came to all, and what have all done?   Romans 5:12

 

  1. Through what did death enter the world, and who experiences it?   Wisdom 2:24

 

  1. What does envy and anger do? Sirach 30:24

 

  1. Where was sin up to the time of the law, and when is sin not accounted?   Romans 5:13

 

  1. What does the law produce, and where is there no violation? Romans 4:15

 

  1. What reigned from Adam to Moses, who dies even though they did not sin, and what was Adam?   Romans 5:14

 

  1. What happened in Adam, and what happened in Christ? 1 Corinthians 15:22

 

Personal – How has sin and death affected your life?

 

  1. What is the gift not like? Romans 5:15

 

  1. What overflowed for the many? Romans 5:15

 

  1. How do we believe we have been saved? Acts 15:11

 

Personal – How has the grace of God affected your life? What does grace mean to you? From you, what is the result it has on others?

 

FOURTH DAY           READ MATTHEW 10:26-33              GOSPEL

(“And do not be afraid of those who kill the body but cannot kill the soul.”)

 

  1. What are we not to be, and what is concealed that will be revealed?   Matthew 10:26

 

  1. What Jesus speaks to us in the darkness, where are we to speak it? What we hear whispered, where are we to proclaim it?   Matthew 10:27

 

Personal – When the Lord speaks to you in your quiet prayer time, how do you make it known to others?

 

  1. What will happen to the person who does not speak? Psalm 32:3

 

  1. Of whom are we not to be afraid, and who are we to fear? Matthew 10:28

 

  1. With what are we not to make alliance, with whom are we to make alliance, and who are we to fear and be in awe? Isaiah 8:12-13

 

  1. What does not fall to the ground without the Father’s knowledge?   Matthew 10:29

 

  1. What is even counted, and why should we not be afraid? Matthew 10:30-31

 

  1. What will happen to us because of Jesus, what will not be destroyed, and what will secure our life?   Luke 21:17-19

 

  1. What are we not to fear? Isaiah 51:7

 

  1. Who will be acknowledged before our heavenly Father, and who will be denied before him?   Matthew 10:32-33

 

  1. What will happen to whomever is ashamed of Jesus and his words, in this faithless and sinful generation?   Mark 8:38

 

Personal – In what ways have you acknowledged Jesus and his words to your family, friends, school friends and co-workers?

 

FIFTH DAY      READ PSALM 69:8-10, 14, 17, 33-35

(“For the Lord hears the poor,”)

 

Read and meditate on Psalm 69:8-10, 14, 17, 33-35.

 

What is the Lord saying to you personally through the Psalm?

 

How can you apply this to your life?

 

SIXTH DAY         READ ALL OF THE COMMENTARY

JEREMIAH 20:10-13

Jeremiah goes straight from the Hinnom Valley to the temple, and with his message challenged the people’s social and moral behavior. He was not afraid to give unpopular criticism. The people could either obey or silence him, and they chose the latter. Their false prophets told them what they wanted to hear. The priest in charge called Pashur, heard Jeremiah’s words and because of his guilt forced him into the wooden stocks. With his hands and feet made fast in the wooden stocks, and being ridicul­ed in front of the entire community, Jeremiah pours out his heart to God. Yet, even this did not stop him from making God’s Word known.

Jeremiah’s role as a prophet put him under terrific pres­sure. He has faithfully proclaimed God’s Word and has received nothing in return, only persecution and sorrow. He tried to with­hold God’s word, but it became like a fire in his bones.

Today, there are many places where people need to be chal­lenged about their moral behavior. The Jeremiahs of today are being ridiculed and silenced, and the false prophets “tickle their ears” with stories of how wonderful they are. When you feel like you are at the end of your rope, remember, there is never an end to hope. You will feel “the fire in your bones,” and you will feel compelled to share it with others, whatever the situa­tion.

ROMANS 5:12-15

The question, “How can we be declared guilty for something Adam did thousands of years ago?” rages on. There are many who feel it is not right for God to judge us for Adam’s sin. Yet, each one of us identifies with Adam by our own sins. We are made of the same “high-fluting,” rebellious, exaggerating attitude and prejudices. We are judged for the sins we commit, because we are sinners. It is not fairness that we need, it is mercy.

Paul tells us once again that keeping the law does not bring salvation. Death is the result of Adam’s sin and for the sins we all commit. The Law was added to help people see their sinful­ness and to show them the seriousness of their offense and to drive them to God for mercy and pardon. This was true in Moses’ day, and it is still true today. Sin is a profound rupture between who we are and who we were created to be. The Law points out our sin and places the responsibility on our shoulders, but the Law offers no remedy for it.

In many nations, prisons are overflowing because accountability calls for discipline, and discipline calls for a commit­ment to an idea. When we are convicted of sin, the only way to heal is through Jesus Christ. Remember, only the truth can really set us free (John 8:32) and the truth is our Lord and Savior Jesus Christ.

MATTHEW 10:26-33

     Today’s Gospel reveals to us the cost of following Jesus Christ. Jesus helped his disciples prepare for the rejection many of them would experience by being Christian. Being God’s person will usually create reactions from others who are resisting him. The disciples experienced hardships not only from without (government, courts, etc.), but also from friends and family.

Living for God often brings on trials and tribulations, but with it comes the opportunity to tell the Good News of Salvation. We can always be confident because Jesus has “overcome the world” (John 16:33), and it is very crucial for us to remember that those who “endure to the end” will be saved (10:22).

You are of incredible worth to God, and you are never lost from his sight or touch. You never are to fear personal threats or difficult trials because they can not shake God’s love and Spirit from you. God placed a tremendous value on each one of us, and he lets us have the choice and the chance to say “No, Lord.” The closer you get to God, the more the world will reject and abuse us. They hated Christ and rejected Him; would we expect anything less? Those who stand up for Christ in spite of their troubles truly will have lasting value and will receive the acknowledgement of God and God’s love will sustain them through any kind of trial.

Application

The first reading tells us that God’s Word is like a hammer that smashes away at the rocks of obstacles. The second reading tells us that death is the result of Adam’s sin, and life is the result of Christ’s sacrifice on the Cross. The Gospel reveals fear as useless, and we must trust in God.

This week, ask yourself what you are doing to be a witness to your faith. How have you responded to the scourge of abortion in your community? See if you can help with letter writing, picket­ing, protesting, praying and voting on moral issues concerning abortion. You will be ridiculed and attacked, socially, emotional­ly, spiritually, and maybe even physically for your loyalty and belief.

This week, become a disciple of Christ and let the Spirit within you be a reminder that the spirit of the world has been defeated.

Lectio Divina – BODY & BLOOD OF CHRIST – CORPUS CHRISTI – A

CORPUS CHRISTI – A

PURPOSE OF THIS SCRIPTURE READING – Develop a personal relationship with Jesus through the Word of God with the understanding that the Holy Spirit will teach and remind us of all Jesus said and did. Psalm 32:8 tells us, “I will instruct you and show you the way you should walk, give you counsel and watch over you.”

  1. Say the opening prayer
  2. Read the passage slowly three times as though Jesus were talking to you.
  3. Converse with Jesus, asking questions and listening to Him.

OPEN WITH THE FOLLOWING PRAYER:

 Father, I can’t understand Your Word without Your grace, I acknowledge my weakness so Your power can reach perfection in me. Send Your Holy Spirit to remind, teach, and guide me to the Truth. May I share as soon as possible whatever You teach me. AMEN

 

READ, REFLECT AND WRITE – John 6:51-58 – Jesus said to the Jewish crowds: “I am the living bread that came down from heaven; whoever eats this bread will live forever; and the bread that I will give is my flesh for the life of the world.” The Jews quarreled among themselves, saying, “How can this man give us his flesh to eat?” Jesus said to them, “Amen, amen, I say to you, unless you eat the flesh of the Son of Man and drink his blood, you do not have life within you. Whoever eats my flesh and drinks my blood has eternal life, and I will raise him on the last day. For my flesh is true food, and my blood is true drink. Whoever eats my flesh and drinks my blood remains in me and I in him. Just as the living Father sent me and I have life because of the Father, so also the one who feeds on me will have life because of me. This is the bread that came down from heaven. Unlike your ancestors who ate and still died, whoever eats this bread will live forever.”

 

  1. What is the Lord personally saying to you?

 

 

  1. What does the Lord personally want you to do?

 

 

Share your reflection with someone.

EL CUERPO Y SANGRE DE CRISTO – CICLO A

EL CUERPO Y SANGRE DE CRISTO – CICLO A

ANTES DE COMENZAR:

Ora y pídele a Dios que te hable a través de Su Espíritu Santo.  “EL ESPIRITU SANTO INTERPRETE, QUE EL PADRE LES ENVIARA EN MI NOMBRE, LES VA A ENSEÑAR TODAS LAS COSAS Y LES RECORDARA TODAS MIS PALABRAS.”  (JUAN 14:26)

PRIMER DIA  Vuelve a leer las lecturas de la semana pasada.

 1. ¿Cuál fue el mensaje qué recibiste de la homilía o de las lecturas que oíste en misa el domingo?

 

  1. ¿De lo que aprendiste, qué escogiste para aplicar a tu vida esta semana?

 

SEGUNDO DIA                         DEUTERONOMIO 8:2-3, 14-16     PRIMERA LECTURA

(“No solo de pan vive el hombre sino de todo lo que sale de la boca del Señor.”)

 

  1. ¿Quién es el que habla y de quién es la palabra del cual anuncia? Deuteronomio 5:1-5

 

  1. ¿Que les pide a los Israelitas que recuerden? Deuteronomio 8:2

 

  1. ¿Cuáles son las dos cosas que el santo de Israel, Dios, Nuestro Dios, hace por nosotros?   Isaías 48:17

 

  1. ¿Por qué cayó la aflicción sobre los Israelitas? Deuteronomio 8:2

 

  1. ¿Cómo los afligió Dios? ¿Con qué los alimentó? y ¿por qué razón lo hizo?    Deuteronomio 8:3

 

  1. ¿Por cuantos días fue Jesucristo tentado por el Diablo? ¿Cuál fue una de las tentaciones?  ¿Qué fue lo que Cristo contestó?  Lucas 4:2-4

 

  1. ¿De que les dice que deben cuidarse después de quedar satisfechos? Deuteronomio 8:14

 

  1. ¿Qué fue lo que Dios hizo por la gente de Israel? Deuteronomio 8:15

 

  1. ¿Cómo se reacciona después de pasar por aflicciones o pruebas? Deuteronomio 8:16

 

  1. ¿Cuando la prueba o la aflicción nos afecta, qué es lo que debemos hacer? Romanos 12:12

 

Personal – ¿De qué forma hay en tu vida un equilibrio entre lo que comes y tu obediencia a la palabra de Dios?  ¿En qué forma aceptas la palabra de Dios?  ¿Comes lo que es bueno para ti tanto en el pan como en la Palabra?  ¿Es la Eucaristía parte de tus alimentos diarios?

¿Qué Clase de Comida Física?

                                    4 Alimentos Básicos                                                                    Alimentos sin valor nutritivo

 

Cuántas Veces

Actitud

Escuchando y Obedeciendo la Palabra

                                                  La Palabra de Dios                                                                      La palabra del hombre

La Palabra de Dios                                                                                 La palabra del hombre

 

Cuantas Veces

Actitud

 

Cuando Recibes la Eucaristía

                                                 Corazón Arrepentido                                                                          Corazón duro

Arrepentido de Corazón                                                                   Con el Corazón Endureicido

 

Cuantas Veces

Actitud

 

TERCER DIA                                  1 CORINTIOS 10:16-17           SEGUNDA LECTURA

(“Todos formamos parte de un mismo pan.”)

 

  1. ¿Quién escribió esta carta y a quién está dirigida? 1 Corintios 1:1-2

 

  1. ¿Cuáles son las dos cosas que el pregunta en 1 Corintios 10:16?

 

  1. ¿Qué fue lo que Jesús hizo con el pan? y qué es lo que dijo que era? Mateo 26:26

 

  1. ¿Qué es lo que hizo con la copa y qué es lo que dijo que era? Mateo 26:27-28

 

  1. ¿En que participamos o compartimos? 1 Corintios 10:16

 

  1. ¿Porque la barra de pan es una, muchos piensan que somos qué? ¿Por qué razón?             1 Corintios 10:17

 

  1. ¿En quién somos un solo cuerpo? Romanos 12:5

 

  1. ¿Así como es un solo cuerpo, también hay un que? ¿Qué es lo que se te da al ser llamado?              Ef. 4:4

 

Personal – ¿En qué forma participas con tu familia y amigos el cuerpo y sangre de Jesús?  ¿Encuentras unidad entre todos con quien convives?  Lee el resto de 1 Corintios 10 y luego examina tu conciencia para que veas si en verdad has adorado el verdadero Dios.

 

CUARTO DIA                                          JUAN 6:51-58                                  EVANGELIO

(“El que coma de este pan vivirá para siempre.”)

 

  1. ¿Quién es que el habla? ¿Quién dice que es y de dónde ha venido?  Juan 6:43 y 51

 

  1. ¿Qué es lo que pasará a aquellos que comen de su pan? Juan 6:51

 

  1. ¿Qué dice que es el pan que él da? ¿Por la vida de quién?  Juan 6:51

 

  1. ¿Cómo reaccionaron los Judíos a esto? ¿Qué fue lo que preguntaron?  Juan 6:52

 

  1. ¿Jesús les aseguró que si no comían del cuerpo del Hijo del Hombre y no tomaban de su sangre, que sería lo que no tendrían? Juan 6:53

 

  1. ¿Qué le pasa al que come de Su Cuerpo y toma de Su Sangre? Juan 6:54

 

  1. ¿Qué es lo que dice Jesús que Su Cuerpo y Sangre son? Juan 6:55

 

  1. ¿El hombre que permanece con Jesús y Jesús con él, qué hace? Juan 6:56

 

  1. ¿Qué es lo que el Padre tiene? ¿A quién mandó y qué es lo que tiene a quién mandó?

Juan 6:57

 

  1. ¿Qué es lo que tendrá el hombre que come y bebe del Cuerpo del Jesús? Juan 6:57

 

  1. ¿De dónde vino este pan? ¿Y a qué no se parece?  Juan 6:58

 

  1. ¿Por cuánto tiempo vivirá el hombre que come de este pan? Juan 6:58

 

Personal – ¿En qué forma demuestras que verdaderamente está El presente en ti después de haber comido de Su Cuerpo y bebido de Su Sangre?

 

QUINTO DIA                          LEE EL SALMO 147:12-15, 19-20

(“…su palabra corre velozmente.”)

 

Lee y medita en el Salmo 147:12-15, 19-20.

 

¿Qué te dice personalmente el Señor por medio de este Salmo?

 

¿Cómo puedes aplicar esto a tu vida diaria?

 

SEXTO DIA                               LEE TODO EL COMENTARIO

                                                      DEUTERONOMIO 8:2-3, 14-16

El pasaje de hoy nos revela lo que en verdad es la “vida real”.  Primeramente tienes que hacerte una pregunta difícil, ¿cómo encuentras la “vida real?”  Hoy en día mucha gente creé que se consigue comiendo las mejores comidas o tomando ligeras y sabrosas bebidas.  Hay otras personas que toman otro extremo el de vestir bien para verse bien.  Otros pasan bastante tiempo tratando de que sus cuerpos se vean atractivos, más jóvenes y más fuertes.  Una cantidad increíble de gente creé que la “vida real” es estudiar para así ganar mucho dinero y poder vivir donde quieren y hacer lo que quieren.  Es lo que hoy en día llamamos vivir la buena vida y para muchos, el modo en que viven otros no tiene la menor importancia.  Pero estos deseos nos dejan vacíos, porque solamente sosiegan nuestros apetitos inmediatos y no nuestros mas hondos deseos y al final estamos insatisfechos y seguimos vacíos.

Moisés nos dice que la vida real viene de confiar en Dios.  Requiere sacrificio, disciplina y simplemente trabajar duro.  Mucha gente hoy en día busca una solución rápida y fácil.  Tanto en una dieta, como en la educación, en su trabajo o en el matrimonio.  Pero solamente si nuestra relación con Dios crece nuestro carácter también se desarrollará y tendrá fuerza.  A lo largo las ganancias que tenemos, al obedecer a Dios, son más grandes que todo lo que tiene para ofrecer el mundo.  El pan que Dios dio a Moisés, fue un pan especial y vino del cielo.

Dios nos muestra, en la última cena a lo que venia, otra forma especial de pan.  Jesucristo nos dio Su Cuerpo y Su Sangre.  Nos dijo, “Este es mi cuerpo, tómalo y come.  Esta es mi sangre tómala y bebe”. Nosotros llamamos esto la Eucaristía y la recibimos en misa.  Somos Eucarísticos cuando comemos Su Cuerpo y tomamos Su Sangre.  Debemos preguntarnos, “¿Cómo podemos hacer Eucarísticos a otros?” Puedes hacer Eucarísticos a otros, dando de ti en muchas formas, como al dar una sonrisa, un abrazo, un beso, una palmada en el hombro a quien se encuentre afligido, dando una taza de café, un vaso de agua, o unos minutos de tu tiempo, escuchando a alguien.  Hay muchas formas de dar de uno a otros y ser Eucarísticos con todos con quien te encuentres.  Cuando dices “Amén” después de comulgar, estás diciendo “sí, yo soy el cuerpo de Cristo.”  Por eso estás llamado a ir y hacer Eucarísticos a los demás.

1 CORINTIOS 10:16-17

Pablo nos muestra como estamos unidos con Dios cuando le pedimos que bendiga nuestra ofrenda de pan y vivo. El acepta y los bendice por medio de la presencia de su hijo, Jesús. Esto era lo ideal para experimentar unidad con Dios por medio de comer el sacrificio era muy fuerte en los días del Judaísmo y en los primeros días del Cristianismo.

En los días del antiguo testamento, cuando un Judío ofrecía un sacrificio, comía parte del sacrificio (Deuteronomio 12:17, 18).  Los Cristianos tanto entonces como hoy, participan en el sacrificio de Cristo cuando comen del pan y vino que es cambiado a Su Cuerpo y Sangre.  La unidad que llamamos el cuerpo de Cristo es parte de todos los que comen y toman del Cuerpo y Sangre de Cristo.  A esto llamamos comunión, que quiere decir que todos tomamos parte del beneficio de la misma procedencia (Cuerpo y Sangre de Cristo).  Cuando comemos del mismo pan, estamos bendecidos con la unidad.

Nos preguntamos el significado de comer el Cuerpo de Cristo, al igual que una vieja pregunta “¿es acaso este un acto de fe en que creemos o es una gran historia que nos piden que creamos?”  Comunión es con-unión que quiere decir en unión con Cristo.  ¿Estás tú en unión con Cristo y su familia?  Cuando hablamos de tomar parte en la bendición de la sangre de Cristo, ¿acaso decimos que sus bendiciones son solo para aquellos que están limpios espiritualmente?  ¿Y que su sangre solo cubre a los justos de Gloria? Necesitamos reflexionar en nuestras actitudes cuando nos acercamos a la mesa del Señor.  En verdad creemos que el pan y vino de nuestro sacrificio se ha transformado en el Cuerpo y Sangre de Jesús?  El modo en que vivimos nuestras vidas será nuestro más grande testimonio de que lo que decimos lo profesamos y creemos.

JUAN 6:51-58

Este pasaje nos desafía a reflexionar en que Jesús es el “Pan de Vida.”  Muchas personas preguntan ¿cómo es que Jesús nos da su cuerpo a comer como pan?  Al comer su cuerpo nosotros nos unimos con Cristo Jesús.  Jesús le dice a la gente que sus padres comieron del pan que viene del cielo y ellos vivieron por un corto tiempo y luego murieron.  El pan que nos da Jesús da vida eterna a todos quienes lo tomen.

No unimos a Cristo al creer en su muerte y su resurrección, y también dependiendo de sus enseñanzas como guía, y teniendo fe en la fuerza del Espíritu Santo.  La gente en el tiempo de Jesús se asustaba solo de pensar en tener que tomar de su sangre y comer de su cuerpo.  Probablemente ellos pensaban que esto era canibalismo.  La ley Judía prohibía tomar sangre (Lev. 17:10-11) y no toleraba usar esa expresión.  Jesús decía que su vida tenía que ser la de ellos.

Hoy en día esta celebración es llamada la Eucaristía que es el dar gracias en unión por que Cristo murió por la humanidad.  Pablo le llama la Cena del Señor (1 Corintios 11:34), y nos dice que Jesús nos enseñó acerca de su última cena en la noche de la Fiesta de Pascua (Lucas 22:13-20).  Debemos recordar que igual como la Fiesta de Pascua celebra, la liberación de la esclavitud en Egipto, la última cena, o comunión, como muchos de nosotros le llamamos, celebra la liberación de nuestros pecados por medio de la muerte de Jesús.  Debemos recordar que Jesús está presente en el pan y vino y cuando comemos de Su Cuerpo y tomamos de Su Sangre estamos proclamando al mundo que El está con nosotros y nos bendice hasta que venga otra vez.  Este es el gran beneficio del nuevo convenio que nos da la oportunidad de personalmente llegar a Dios y comunicarnos con El.

Al comer el pan sagrado y el vino sagrado nos convertimos en gente del “Amén.” O sea que nosotros decimos “Amen, sí yo lo creo y lo vivo.”  Cuando se nos presenta el pan consagrado y el vino, y nos dicen “El Cuerpo de Cristo”, “Sangre de Cristo”, nuestro “Amén” es nuestro sí a su presencia en nosotros, y en todos quienes lo comen.  Entonces somos llamados en unión, a seguir adelante y presentar la fuerza de la Eucaristía a otros por medio de nuestro amor y servicio.  Sabrán que somos Cristianos por que nuestro amor es grande y no es nada más un decir.

Aplicación

La primera lectura nos dice que la vida real viene de una entrega total a Dios.  La segunda lectura nos muestra que “comunión” es con-unión o sea con o en unión con Cristo.  El Evangelio nos dice que “comunión” o Eucaristía significa dar gracias en unión por que Cristo murió por todos los seres humanos.

El Cuerpo y Sangre de Cristo nos es dado por medio de la Santa Comunión.  Demostremos esta semana a los demás que El vive en nosotros, por el modo en que amamos dando bondad y gentileza a otros. Demostremos a los demás que este pan de vida es una comida que alimenta el corazón, la mente, el cuerpo y el Espíritu.  El ser compasivo, atento y amoroso, servirá de señal a otros para que vean que esto es mucho más que un simple símbolo.

Demuéstrales a otros como les traes la Eucaristía.  Puedes dar Eucaristía a los demás con un gesto cariñoso, una notita de apoyo, una taza de té, un hombro donde llorar, una espalda que necesite un masaje. Eucaristía es lo que llamamos el Cuerpo y la Sangre de Cristo.  Podemos recibir la Eucaristía en la iglesia y luego salir y darla a toda persona con la que estemos en contacto.

THE BODY AND BLOOD OF CHRIST ‑ CYCLE A

 

THE BODY AND BLOOD OF CHRIST ‑ CYCLE A

BEFORE YOU BEGIN

Pray and ask God to speak to you through His Holy Spirit.

“THE PARACLETE, THE HOLY SPIRIT WHOM THE FATHER WILL SEND IN MY NAME, WILL INSTRUCT YOU IN EVERYTHING, AND REMIND YOU OF ALL THAT I TOLD YOU.” (JOHN 14:26)

FIRST DAY Reread last week’s readings.

  1. What was a helpful or new thought from the readings or from the homily you heard on Sunday?

 

  1. From what you learned, what personal application did you choose to apply to your life this week?

 

SECOND DAY      READ DEUTERONOMY 8:2‑3, 14‑16   FIRST READING

(“Not by bread alone does man live, but by    every Word that comes forth from the mouth of the Lord.”)

  1. Who is speaking, and whose words is he announcing? Deuteronomy 5:1‑5

 

  1. What is he asking the Israelites to remember? Deuteronomy 8:2

 

  1. What two things does the Holy One of Israel, the Lord, our God, do for us?   Isaiah 48:17

 

  1. Why did affliction come upon the Israelites? Deuteronomy 8:2

 

  1. With what did the Lord let them be afflicted? With what did he feed them, and for what reason?   Deuteronomy 8:3

 

  1. How many days was Jesus tempted in the desert by Satan? What was one of the temptations, and what was Jesus’ answer? Luke 4:2‑4

 

  1. Of what is he telling them to be careful after they have their fill?   Deuteronomy 8:14

 

  1. What did the Lord do for the Israelites? Deuteronomy 8:15-16

 

  1. What do affliction and testing make us in the end? Deuteronomy 8:16

 

  1. When under trial or affliction, what are we to do? Romans 12:12

 

Personal ‑ In what way is there a balance in your life between the food you eat and obedience to the Word of God? In what way are you taking in the Word? Are you eating what is good for you in bread and Word? Is Eucharist part of your daily nourishment?

 

What Kind of Physical Food

4 Basics                         Junk Food

 

How Often

Attitude

 

Listening and Obeying the Word

God’s Word                       Man’s Word

 

How Often

Attitude

 

When Receiving Eucharist

Repentant Heart                  Hard Heart

 

How Often

Attitude

 

THIRD DAY        READ 1 CORINTHIANS 10:16‑17   SECOND READING

(“We all partake of the one loaf.”)

  1. Who wrote this letter and to whom was he writing? 1 Corinthians 1:1‑2

 

  1. What are the two questions he asks them in 1 Cor. 10:16?

 

  1. What did Jesus do with the bread and what did he say it was? Matthew 26:26

 

  1. What did he do with the cup, and what did he say it was? Matthew 26:27‑28

 

  1. In what do we share or participate? 1 Corinthians 10:16

 

  1. Because the loaf of bread is one, we, many though we are, are what, and for what reason? 1 Corinthians 10:17

 

  1. In whom are we one body? Romans 12:5

 

  1. Just as there is one body, there is also one what, and what is given you by your call?   Ephesians 4:4

 

 Personal ‑ In what way do you share in the body and blood of Jesus with your family and friends? Is there a oneness and unity among those with whom you associate? Read the rest of 1 Corinthians 10. Examine your conscience to see whether you have been worshiping the One, True God.

 

FOURTH DAY              READ JOHN 6:51‑58                GOSPEL

(“If anyone eats this bread, he shall live forever.”)

  1. Who is speaking? Who did he say he was, and from where has he come down? John 6:43, 51

 

  1. What did he say would happen to those who eat this bread? John 6:51

 

  1. What did he say the bread he will give is, and for the life of whom?   John 6:51

 

  1. How did the Jews react to this, and what did they ask? John 6:52

 

  1. Jesus assured them that if they did not eat the flesh of the Son of Man and drink his blood, they would have no what? John 6:53

 

  1. What happens to him who feeds on his flesh and drinks his blood?   John 6:54

 

  1. What does Jesus say his flesh and blood are? John 6:55

 

  1. The man who remains in Jesus, and Jesus in him, does what? John 6:56

 

  1. What does the Father have? Whom did he send, and what does he who was sent have because of him?   John 6:57

 

  1. What will the man who feeds on Jesus have because of him? John 6:57

 

  1. Where did this bread come from, and what is it unlike? John 6:58

 

  1. How long will the man live who lives on this bread? John 6:58

 

Personal ‑ How has the eating of Jesus’ flesh, and drinking of his blood, which is the Eucharist, shown others that he is truly present in you?

 

FIFTH DAY         READ PSALM 147:12‑15, 19‑20

(“…swiftly runs his Word.”)

 

Read and meditate on Psalm 147:12-15, 19-20.

 

What is the Lord saying to you personally through the Psalm?

 

How can you apply this to your life?

 

SIXTH DAY         READ ALL OF THE COMMENTARY

DEUTERONOMY 8:2‑3, 14‑16

Today’s passage reveals what it really means to live the “real life.” You have to ask yourself a very difficult question: “How do you find “real life?” Today, many people think it comes when you eat the right foods, or drink the light and tasty drinks. Some go to extreme measures to make sure they dress well so that they may look good. Others spend enormous amounts of time trying to build up their bodies in order to look more attractive, younger or stronger. An incredible number of people think the “real life” is to obtain an education so they can earn a fortune and live wherever they choose and do whatever they decide. Today, we call this “living the good life,” and for many, the way others must live does not enter into their concern. But these desires leave us empty because they satisfy only our appetites, not our deepest longings.

Moses tells us that real life comes from total commitment to God. It requires sacrifice, discipline, and plain hard work. Many people today are looking for the quick fix whether it be for a diet, an education, marriage, or work. Only as our relationship with God deepens will our character and strength develop. The long‑term rewards for obeying God are greater than anything the world has to offer. The bread God gave Moses was a special kind of Bread, and it came from heaven.

God showed what was coming in the form of another special kind of bread at the Last Supper. Jesus gave us himself in the taking and eating of his Body and Blood. He said, “This is my Body, take and eat. This is my Blood, take it and drink.” We call this “Eucha­rist,” which we receive at Mass. We become “Eucharist­ed” when we eat his body and drink his blood. We might ask, “How do we Eucharist others?” You can Eucharist others by giving of yourself in many ways. You Eucharist others when you give them a smile, a hug, a kiss, a loving pat on the shoulder when they are emotionally in pain, a cup of coffee, a glass of cold water, and a few moments of your time to listen. There are many ways to give yourself away to others, and be Eucharisting every one you meet. “Eucha­rist” is at its best when we joyfully give it away. When we say “amen” at communion time, we are saying “Yes, I am the body of Christ.” That is why we are called to go out and Eucharist his people.

1 CORINTHIANS 10:16‑17

Paul tells us that we have unity with God when we ask God to bless the wine and bread that is offered, he accepts it, and blesses it through the presence of his Son, Jesus. The ideal of experiencing unity with God through eating a sacrifice was strong in the old days of Judaism, and in the early days of Christianity.

In the Old Testament days, when a Jew offered a sacrifice, he ate part of that sacrifice (Deut. 12:17, 18). Christians then, and today, participate in Christ’s once-and-for-all sacrifice when they eat the bread and drink the wine that is changed into his body and blood. This unity that we call the body of Christ is shared by all who eat and drink of the body and blood of Christ. We call this Communion, which means the believers share in the benefits of the same source (body and blood of Christ). When we all eat from the same loaf, then we are blessed with the gift of unity.

We may ask, “What does it mean to eat the body of Christ, and to share in his glory?” We are asked to reflect to the age‑old question, “Is this an act of faith that we believe in, or is it some great story that we are expected to believe?” Communion is com‑union which means with or union with Christ. Are you in communion with Christ and his family? When we say we share the blessings of Christ’s blood, are we saying that his blessings are only for the spiritually clean, and that his blood covers only the righteous with glory? We need to reflect on our attitude as we come to the table of the Lord. Do we really believe that the bread and wine of our sacrifice has been transformed into the body and blood of Jesus Christ. The way we live out our lives will be our greatest testimony to what we say we profess and believe. His “Yes” is our whole healing presence of himself in the Holy Eucharist.

JOHN 6:51‑58

This passage challenges us to reflect on Jesus being the “bread of life.” Many people today ask, “How can Jesus give us his flesh as bread to eat?” To eat his living bread means to unite ourselves with Jesus Christ. Jesus tells the people that their fathers in the wilderness ate the bread that came from the skies, and gave them life for a time, but they eventually died. The bread that Jesus gives is eternal life to anyone who partakes of it.

We are united with Christ when we believe in his death and resurrection, and depend on his teaching for guidance, and trust in the Holy Spirit for power. The people of Jesus’ day were shocked just to imagine drinking his blood and eating his flesh. They probably thought this was very cannibalistic. The Jewish law forbade drinking blood (Lev. 17:10‑11), and they could not tolerate such a statement. Jesus was saying that his life had to become their life.

Today, the celebration is called the Eucharist which means thanksgiving or giving thanks in unity that Christ died for all mankind. Paul calls it the Lord’s Supper (1 Corinthians 11:23), and he tells us that Jesus taught us about his Last Supper on the night of the Passover (Luke 22:13‑20). We need to remember that just as Passover celebrated deliverance from slavery in Egypt, so the Lord’s supper or communion as most of us know it, celebrates deliverance from sin by Christ’s death. We need to really remember that Jesus is present to us in the bread and wine, and when we eat his body and drink his blood, we are proclaiming to the world that he will be within us, and bless us until he comes again. This is the tremendous benefit of the new covenant that allows us personally to approach God and communicate with him.

Eating the Sacred Body and drinking the Sacred Blood makes us “Amen” people. That is, we are saying “Amen or yes, I believe it, and I will live it out” when the celebrant hands the consecrated bread and wine to us and says “Body of Christ, Blood of Christ.” Our “Amen” is a yes, not only present in bread and wine, but also to his total presence in ourselves and others as we consume it. We are then called in unity to go forth and present the power and presence of that Eucharist to others by giving it away through our love and service. “They will know we are Christians by our love” is more than just a saying.

Application

The first reading tells us that real life comes from total commitment to God. The second reading shows us that “communion” is com-union which means with or in union with Christ. The Gospel tells us that “communion,” or Eucharist, means giving thanks, in unity that Christ died for all mankind.

The body and blood of Christ is given to us in Holy Communion. Let us, this week, show others that he lives within us by the way we act in love, kindness and gentleness. Let others see that this bread of life is a food that nurtures the heart, the mind, the body and the spirit. Your taking time to be compassionate, caring, and loving will be a sign to others that this is much more than a symbol.

Show those around you how you bring Eucharist to them. You can Eucharist people with a caring touch, a little note of affirmation, a cup of tea, a shoulder to cry on, a back that needs rubbing. Eucharist is what we call the Body and Blood of Christ. We can receive Eucharist in church and then go out and Eucharist every person with whom we come in contract.

Lectio Divina – TRINITY SUNDAY – A

TRINITY SUNDAY – A

PURPOSE OF THIS SCRIPTURE READING – Develop a personal relationship with Jesus through the Word of God with the understanding that the Holy Spirit will teach and remind us of all Jesus said and did. Psalm 32:8 tells us, “I will instruct you and show you the way you should walk, give you counsel and watch over you.”

  1. Say the opening prayer
  2. Read the passage slowly three times as though Jesus were talking to you.
  3. Converse with Jesus, asking questions and listening to Him.

OPEN WITH THE FOLLOWING PRAYER:

Father, I can’t understand Your Word without Your grace, I acknowledge my weakness so Your power can reach perfection in me. Send Your Holy Spirit to remind, teach, and guide me to the Truth. May I share as soon as possible whatever You teach me. AMEN

READ, REFLECT AND WRITE – John 3:16- God so loved the world that He gave His only Son, so that everyone who believes in Him might not perish but might have eternal life. For God did not send His Son into the world to condemn the world, but that the world might be saved through Him. Whoever believes in Him will not be condemned, but whoever does not believe has already been condemned, because he has not believed in the name of the only Son of God.

 

  1. What is the Lord personally saying to you?

 

 

  1. What does the Lord personally want you to do?

 

Share your reflection with someone.

DOMINGO DE LA SANTISIMA TRINIDAD – CICLO A

DOMINGO DE LA SANTISIMA TRINIDAD – CICLO A

ANTES DE COMENZAR:

Ora y pídele a Dios que te hable a través de Su Espíritu Santo. “EL ESPIRITU SANTO INTERPRETE, QUE EL PADRE LES ENVIARA EN MI NOMBRE, LES VA A ENSEÑAR TODAS LAS COSAS Y LES RECORDARA TODAS MIS PALABRAS.” (JUAN 14:26)

PRIMER DIA Vuelve a leer las lecturas de la semana pasada.

1. ¿Cuál fue el mensaje qué recibiste de la homilía o de las lecturas que oíste en misa el domingo?

2. ¿De lo que aprendiste, qué escogiste para aplicar a tu vida esta semana?

SEGUNDO DIA LEE EXODO 34:4-6, 8-9 PRIMERA LECTURA
(“El Señor, Dios es compasivo y tierno.”)

1. ¿Qué le dijo el Señor a Moisés y quién inscribió las tablas de piedra? Éxodo 24:12 y 31:18

2. ¿Porqué fue Moisés al Monte Sinaí? Éxodo 34:4

3. ¿Qué les sucedió a las tablas de piedra? Éxodo 32:19

4. ¿Qué cortó Moisés entonces, a dónde fue y por órdenes de quién? Éxodo 34:4

5. ¿Quién descendió en una nube frente a Moisés y qué proclamó? Éxodo 34:5

6. ¿Qué hizo el Señor y qué proclamó? Éxodo 34:6

7. ¿En qué es el Señor lento y en qué es rico? Éxodo 34:6

8. ¿Cuál fue la reacción de Moisés? Éxodo 34:8

9. ¿Qué dice el Salmo 95:6 que debemos hacer y qué ha hecho el Señor?

10. ¿Qué le pidió Moisés al Señor y qué le dijo acerca de la gente? Éxodo 34:9

11. ¿Qué le pidió Moisés al Señor que perdonará y recibirá? Éxodo 34:9

PERSONAL – ¿De qué manera has demostrado a los que te rodean que no te precipitas y enojas con rapidez? ¿Puedes mejor en esto?

TERCER DIA LEE 2 CORINTIOS 13:11-13 SEGUNDA LECTURA
(“Anímense, tengan un mismo sentir y vivan en paz.”)

1. ¿Quién está escribiendo y a quién escribe? 2 Corintios 13:1

2. Al terminar, ¿cuáles son las dos cosas que les pide y cómo les dice que deben vivir?
2 Corintios 13:11

3. ¿Dónde estará el Dios de amor y paz? 2 Corintios 13:11

4. ¿Cómo debemos saludarnos unos a otros y qué hacen todos los santificados?
2 Corintios 13:12

5. ¿Qué es lo que Jesucristo tiene? 2 Corintios 13:13

6. ¿Qué estaba sobre Jesús mientras crecía en tamaño y estatura? Lucas 2:40

7. ¿Qué es lo que Dios tiene? 2 Corintios 13:13

8. ¿Qué es Dios y qué nos pasa cuando vivimos en Dios? 1 Juan 4:16

9. ¿Qué es lo que tiene el Espíritu Santo? 2 Corintios 13:13

10. ¿A qué hemos sido llamados para con el Hijo? 1 Corintios 1:9

Personal – ¿En qué forma conservas amistad con el Espíritu Santo? ¿Ves la gracia de Jesucristo y el amor de Dios en ti mismo? ¿Ves a Jesús en los que te rodean?

CUARTO DIA LEE JUAN 3:16-18 EVANGELIO
(“…aquellos que crean en El no morirán.”)

1. ¿A quién amó Dios y para que lo envió? Juan 3:16

2. ¿Qué les sucede y qué tendrán los que creen en El? Juan 3:16

3. ¿Cómo se revela el amor de Dios a nosotros? 1 Juan 4:9

4. ¿Para qué no envió Dios a Su Hijo? Juan 3:17

5. ¿Qué pasará al mundo por medio de El? Juan 3:17

6. Lee los siguientes versículos y escribe junto a cada uno lo que dice acerca de la salvación:
a. Hechos 2:21
b. Hechos 4:12
c. Hechos 15:11
d. Romanos 10:9
e. Tito 3:4-5

7. ¿Qué les pasa a quienes creen en Jesús? Juan 3:18

8. ¿Qué les sucede a los que no creen en El? Juan 3:18

9. ¿Quiénes no se van a condenar? Romanos 8:1

11. ¿Qué es lo que vino a hacer Jesús y qué condena a una persona? Juan 12:47-48

Personal – ¿De qué manera hemos experimentado el amor del Padre por medio de la muerte de Jesús en la cruz? ¿Participas ese amor del Padre hacia ti con tu familia, amigos y compañeros diariamente? ¿Hay en ti un equilibrio entre lo que dices y lo que haces?

QUINTO DIA LEE DANIEL 3:52-56
(“y bendito sea tu santo y glorioso nombre.”)

Lee y medita en el Daniel 3:52-56.

¿Qué te dice personalmente el Señor por medio de este Salmo?

¿Cómo puedes aplicar esto a tu vida diaria?

SEXTO DIA LEE TODO EL COMENTARIO

EXODO 34:4-6, 8-9

Hoy celebramos la fiesta de la Santísima Trinidad y vemos en este pasaje como Dios hace una alianza con los Israelitas; los convierte en Su pueblo escogido por medio del cual eventualmente mandará a Su Hijo y al Espíritu Santo para dar a la humanidad la posibilidad y los medios de llegar a la morada eterna con El. Su plan es de dimensión eterna.
Explicar el misterio sería imposible y sin embargo, es simple. Dios nos amó tanto que hasta nos mandó a Su hijo único para que muriera por nosotros, y dejó a su Espíritu Santo para que diera poder a nuestras vidas. Una mujer se casa y se convierte en esposa, luego en madre y después en abuela; nunca deja de ser mujer por medio de las diferentes fases de su vida; podríamos preguntar sin fin: ¿qué parte de ella se vuelve esposa, que parte de ella se vuelve madre? En ese sentido ella juega diferentes papeles en la misma persona de mujer.
Dios es Dios y dijo a Moisés: “YO SOY EL QUE SOY.” La alianza hecha en Sinaí por Dios con Moisés fue la preparación de Dios para encarnarse (Dios se hace hombre) y dejarnos después su Espíritu Santo para siempre. Este es el gran misterio que un día nos revelará Dios en la gloria, donde lo veremos cara a cara. Los Israelitas eran terriblemente tercos, pecadores y realmente no merecían otra oportunidad, pero Moisés abogó por ellos y Dios los perdona y les prometió que el Mesías vendría de ellos para traer la salvación a todo el mundo.
Hoy en día hay todavía mucha gente terca, cruel y violenta que camina en la oscuridad; el Mesías ya vino y murió y resucitó de entre los muertos por todos los que creemos. Tenemos dentro de nosotros al Espíritu Santo quien es mucho más poderoso que el que está en los que son del mundo (1 Juan 4:4). Nunca debemos olvidar que somos escogidos de Dios en el nombre del Padre, en el nombre del Hijo y en el nombre del Espíritu Santo. Amén.

2 CORINTIOS 13:11-13

Las últimas palabras de Pablo en este pasaje se aplican a nosotros en nuestro mundo actual; él dice que debemos ser felices y podemos hacerlo si crecemos en Cristo; estamos llamados a corregir los caminos, en otras palabras arrepentirnos y cambiar. Podemos vivir en paz con los demás cuando seguimos las enseñanzas del Príncipe de la Paz, Jesucristo. Estamos llamados a saludar a los demás con el signo sagrado de la bendición de Jesús; solo necesitamos mirar a nuestro alrededor y ver la discordia en nuestras familias, comunidades y países en todo el mundo. Podríamos preguntar, ¿de dónde vienen todas las diferencias y los celos?
Pablo nos dice que toda discordia viene de tratar de controlar a otros y de jugar a ser Dios con las vidas de los demás y con sus naciones. Para vivir en paz con los demás, necesitamos estar en paz primeramente con nosotros mismos. Jesús dijo que nos dejaría Su Espíritu Santo y que nunca nos dejaría.
Pablo cierra este pasaje con palabras de ánimo y alegría para todos nosotros. Nos muestra como la Santísima Trinidad está siempre activa y presente en nuestras vidas. Dice: “Que el amor de Dios y la amistad del Espíritu Santo esté con ustedes”. También se refiere a la gracia de nuestro Señor y nos dice que Su gracia siempre estará a nuestra disposición.
Pablo está una vez más, invocando a Dios para que bendiga, dirija y proteja a su gente, por medio del poder del Espíritu Santo en el nombre que está por sobre todos los nombres, Jesucristo. Somos llamados a traer la bendición sobre nosotros mismos y nuestras familias. Esto te ayudará a vivir en paz y armonía con toda la gente.

JUAN 3:16-18

Si tuviéramos un solo pasaje de la Biblia para leer, pienso que éste sería el escogido por muchos. “Porque Dios amó tanto al mundo, que le dio a Su Único Hijo para que quienes creyeran en El, no murieran sino que tuvieran vida eterna.” ¿Crees realmente en esto? Dios te dice que te ama tanto que envió a Su Hijo Jesús a Morir por ti, de manera que tú pudieras vivir para siempre con El en el cielo. Dios hizo esto por ti sabiendo perfectamente que serías un pecador y sin embargo El todavía te ama mucho.
La escritura nos dice que “el ojo no ha visto, el oído no ha oído, a nadie se le ocurrió pensar lo que Dios ha preparado para los que lo aman” (1 Cor. 2:9). Ni siquiera podemos imaginar esa clase de amor y sin embargo, es verdadero. Solo necesitamos creer en Jesucristo. Cuando creemos, nuestras vidas se transforman y el cambio es notado por los demás. Nos volvemos vulnerables, amables, gentiles, generosos y confiables.
Dios sabe donde has estado, que has hecho y encima de todo, todavía te ofrece el increíble regalo de la vida eterna y una paz que sobrepasa todo entendimiento (Fil. 4:7). Apréndete de memoria este versículo: (Juan 3:16) y pon tu nombre en lugar de “mundo” y de “todo aquel”, ve que tan personal es ésta promesa.
Necesitamos recordar que el amor verdadero no es ni estático ni egoísta, sino que busca y atrae a los demás. Dios ha sentado el precedente del amor verdadero en este pasaje, como base de toda relación de amor. Si amas mucho a alguien, debes estar dispuesto a pagar con cariño por la respuesta de amor de esa persona; Jesucristo pagó por amor el precio máximo con Su vida. Dios pagó con la vida de Su Hijo por nuestro amor. Jesús aceptó el castigo, pagó por nuestros pecados y entonces nos ofreció la vida nueva y eterna que compró para nosotros con Su sangre. Cuando compartimos tú y yo el mensaje del Evangelio, nuestro amor es como el de Dios. Debemos estar dispuestos a prescindir de nuestras comodidades, quizá de nuestras vidas, de manera que otros puedan unirse a nosotros a recibir este increíble don del amor de Dios.

Aplicación

La primera lectura nos revela que Dios está presente en Si mismo, en el Hijo y en el Espíritu Santo verdaderamente la Santísima Trinidad. La segunda lectura nos muestra que crecer en Jesucristo nos trae una respuesta feliz, que es lo que necesitamos en nuestro mundo de hoy. El Evangelio nos enseña que Dios nos amó tanto que nos dio a Su único Hijo, para que pudiéramos vivir eternamente.
Esta semana, pidamos el poder del Espíritu Santo y seamos positivos en nuestras palabras y nuestras acciones con los miembros de nuestra familia, con los que convivimos, en la Iglesia y en la escuela. Prescindamos esta semana de las comodidades para ir en busca de alguien y ganarlo para Cristo. Quizá leas las Escrituras a alguien, o procura que alguien lea la Biblia. Recuerda: has un amigo, sé un amigo y atrae a ese amigo a Cristo.